El primer sacramento de la iniciación recibe, ante todo, el nombre de Bautismo, en razón del rito central con el cual se celebra: bautizar significa "sumergir" en el agua; quien recibe el Bautismo es sumergido en la muerte de Cristo y resucita con Él "como nueva criatura"(2 Co 5, 17). Se llama también "Baño de regeneración y renovación en el Espiritu Santo" (Tt 3, 5), e "Iluminación", porque el bautizado se convierte en "Hijo de la la Luz" (Ef 5 ,8) (C.I.C)
Por el bautismo somos liberados del pecado y regenerados como hijos de Dios, quedando incorporados a la Iglesia como miembros de Cristo.
"Los padres tienen obligación de hacer que los hijos sean bautizados en las primeras semanas; cuanto antes después del nacimiento e incluso antes de él, acudan al párroco para pedir el sacramento para su hijo y prepararse debidamente." (C.I.C 867)
Es lo más grande que pueden dar a sus hijos. Ellos les estarán agradecidos eternamente.El sacramento de la confirmación, que imprime carácter y por el que los bautizados, avanzando por el camino de la iniciación cristiana, quedan enriquecidos con el don del Espíritu Santo y vinculados más perfectamente a la Iglesia, los fortalece y obliga con mayor fuerza a que, de palabra y obra, sean testigos de Cristo y propaguen y defiendan la fe. (CIC 879)
PENITENCIA
EUCARISTÍA
La Sagrada Eucaristía culmina la iniciación cristiana. Los que han sido elevados a la dignidad del sacerdocio real por el Bautismo y configurados más profundamente con Cristo por la Confirmación, participan por medio de la Eucaristía con toda la comunidad en el sacrificio mismo del Señor.
"Nuestro Salvador, en la última Cena, la noche en que fue entregado, instituyó el sacrificio eucarístico de su cuerpo y su sangre para perpetuar por los siglos, hasta su vuelta, el sacrificio de la cruz y confiar así a su Esposa amada, la Iglesia, el memorial de su muerte y resurrección, sacramento de piedad, signo de unidad, vínculo de amor, banquete pascual en el que se recibe a Cristo, el alma se llena de gracia y se nos da una prenda de la gloria futura" (SC 47).
La unción de los enfermos "no es un sacramento sólo para aquellos que están a punto de morir. Por eso, se considera tiempo oportuno para recibirlo cuando el fiel empieza a estar en peligro de muerte por enfermedad o vejez"
(SC 73; cf CIC, can. 1004,1; 1005; 1007; CCEO, can. 738).(CEC 1514)
(SC 73; cf CIC, can. 1004,1; 1005; 1007; CCEO, can. 738).(CEC 1514)
ORDEN SACERDOTAL
MATRIMONIO
"La alianza matrimonial, por la que el varón y la mujer constituyen entre sí un consorcio de toda la vida, ordenado por su misma índole natural al bien de los cónyuges y a la generación y educación de la prole, fue elevada por Cristo Nuestro Señor a la dignidad de sacramento entre bautizados"
(CIC, can. 1055,1)